Se me juntan otra vez varios temas de los que me apetece escribir un poco sin necesidad de dedicarle un post entero a cada uno. Sin más empiezo a darle caña.
Se acaba el mundillo....otra vez: A raíz de este comentario de Antonio Martín en su página de Facebook se ha generado un intenso debate que ha tenido especial eco en redes sociales como twiter así como en alguno de los blogs más destacados de lo que queda blogosfera comiquera. El mensaje pesimista lanzado por Martín tiene su peso por venir de quien viene: toda una institución ya en la historia del cómic en España y que lleva los suficientes años en el mundillo como para saber de lo que habla...Y tal vez ese sea el quid de la cuestión, Martín sabe de lo que habla, ha estado muy ligado al mundillo y conoce a mucha gente de dentro, algo que no todos los críticos pueden decir y más en un mundo tan hermético como este, donde aún se sigue diciendo aquello de que los que piden cifras de ventas, distribución y demás lo hacen solo por morbo (al reciente comunicado de ECC me remito). Así que si bien es cierto que el critico debería tener en cuenta la vertiente comercial del ámbito en el que se circunscribe su labor critico-divulgativa, no lo es menos que en el mundo del cómic eso es algo difícil habida cuenta de su sempiterno hermetismo.
Más allá de esto el panorama que pinta Martín es bastante chungo, pero no se hasta que punto se pude calificar de sorprendente. Es decir en el contexto actual, con la brutal caída de consumo ante el legitimo temor del ciudadano ante los continuos recortes, ¿es realmente noticia que en el mundo del cómic haya editoriales que lo estén pasando mal? Lo noticioso sería lo contrario. El tema esta creo yo en que por un lado: es complicado que desde la critica se puede hacer nada más que describir la situación, y a veces, con la ausencia de datos, ni eso. Por otro lado es cierto que estamos viviendo un momento de gran calidad del cómic español y de multiplicación de la opciones que el lector tiene ante si. Los críticos, ya sea esos “gurus de la novela gráfica” a los que Martín alude de manera un tanto desafortunada, ya sea el más humilde bloguero desde su pequeño espacio, hacen bien en hablar de ello y en señalarlo. Es cierto que esa no esta toda la realidad del cómic español, pero si forma parte de esa realidad y creo que la labor divulgativa enfocada en positivo siempre podrá ayudar más que la mera descripción de un desastre comercial que puede avecinarse (o no) pero del que el cómic saldrá, como siempre ha hecho, adelante
The Private Eye: He de reconocer que no me gusta mucho leer tebeos digitales. No tengo tablet (ni muchas ganas de tenerla, la verdad), leer en un smartphone de 4,3 pulgadas no me parece muy recomendable y el PC, si no queda otra alternativa (Miracleman hasta hace bien poco) puedo aceptarlo, pero no es desde luego los más cómodo o no lo es al menos en mi caso. Se que es el futuro, se que el cómic/libro digital se irá poco a poco generalizando y demás, pero no va conmigo y dudo que lo haga en un futuro. Pero claro en estas salen cosas como The Private Eye y llaman la atención. Un cómic que (al menos en principio) solo se va a distribuir vía digital, con dos autores de renombre (Brian K. Vaughan y Marcos Martín) que se puede descargar en español, catalán e ingles y donde tú como cliente pones el precio que consideras justo yendo a parar todo el dinero (menos la parte que se lleve Paypal) a los autores. No suena nada mal. Aunque claro hay pegas, he leído algunas cosas como: si esto se generaliza ¿que pasará con el librero que sigue a día de hoy sosteniendo a la industria? Imagino que nada, esto es solo una vía más de distribución, no va contra nadie ni creo, pretende acabar con nada. Es simplemente autoedición modelo siglo XXI.
Como digo el tema me ha llamado la atención y he decido pagar 3$ (2,40€ al cambio +/- como una grapa). Además el primer número me ha parecido muy interesante con un Martin on fire y con una trama (un mundo postinternet donde la privacidad es la mercancía más valiosa) que puede dar mucho de si. Serán 10 números de cadencia mensual y en principio tengo intención de esta ahí para disfrutarlo.
Estrenos televisivos: En espera de ponerme con Black Mirror y House of Cards y con expectativas de ver de una vez las dos temporadas de American Horror Story. Este año solo he visto tres estrenos televisivos. El primero sería Arrow que he de reconocer que me esta pareciendo bastante maja. Vale es un poco un Batman de segunda (tal y como nació en los cómics por otro lado) con algunos toques de Spiderman pero es una serie, honesta que solo busca entretener, algo que, en mi caso, consigue sobradamente. Con personajes interesantes, tramas que se disfrutan y que además combina con sabiduría la formula con la existencia de toda una historia de fondo que da mucho juego. No esperaba nada y la verdad es que me ha sorprendido.
El segundo sería The Following. Su premisa aunque no novedosa si es llamativa: un psicópata obsesionado por Edgar Alan Poe traza un intrincado plan con ayuda de múltiples seguidores para destrozar la vida del agente de policía que le encerró y de paso reconstruir la suya. Esto y que el piloto fue bastante interesante me hizo seguir una serie que casi desde el principio camino en la fina línea que se dibuja entre la genialidad y el ridículo para caer de lleno en este desde el lamentable sexto episodio. Ahora deseando que acaben los 15 episodios que componen la primera temporada (no se si por “deformación profesional” por aquello del coleccionismo asociado a los cómics, pero soy incapaz de dejar una temporada a medias) puedo decir con seguridad que es de las peores series que he visto en los últimos años. Con diferencia.
Queda para el final la más interesante y sorprendente de todas: Utopía. Una miniserie británica de 6 episodios en torno a una gran conspiración que se centra el cómic que da titulo a la serie. Más allá de los misterios conspirativos, de la caracterización de personajes o de la historia de fondo (todos ellos elementos sobresalientes en Utopía) si por algo destaca esta serie es por lo enfermizo de su fotografía. Con unos intensísimos colores que dan un aire irreal a todo el producto y exageran las acciones de personajes extremos metidos en un juego muy peligroso. El que sean solo 6 episodios condiciona por una lado que se trate de una serie densa con muchos conceptos y argumentos que han de estar por fuerza concentrados, por otro lo bizarro de muchos de sus personajes y situaciones hacen de la serie un complejo puzzle del que se disfruta enormemente hasta que la piezas van encajando para dar como resultado un final, quizá demasiado convencional para el tono de la serie, pero en todo caso coherente con lo narrado. Merece mucho la pena.
5 comentarios:
Jo, pues The Following era una de las propuestas de este año que más me llamaban la atención :(
Por otro lado, como bien dices, estamos en crisis y si cuando no lo estabamos ya estaba jodida la cosa para las pequeñas editoriales, pues ahora...
Hombre no se, a lo mejor te gusta, pero para mi The Following esta siendo una terrible decepción.
Por lo demás claro, la cosa esta muy mal para todos y el mundo del cómic no es una excepción.
Joder con lo de ecc. Siempre con lo mismo. Al lector no le interesa las cifras porque le da igual. Coño, me importa porque así se si estoy pagando un precio justo según mi propio criterio. Si imprimes mucho y lo vendes igual de caro que algo que has impreso poco eso puede cambiar mi comportamiento. Saber tiradas y ventas sería información del consumidor tan útil como poner la procedencia o los ingredientes. Una cosa que sí sabe el lector y que le es menos importante es la imprenta. Por qué eso sí y no saber si vas a por mi dinero?
En cuanto a lo de la crisis creo que el sector más afectado por ella es el que no compra cómics. Opino que lo que más daño ha hecho son los tomos caros, porque restan ventas. La cosa no puede ir tan mal viendo lo que saca Panini o la vuelta a la independencia de Aleta. Lo que hay que tener en cuenta es que antes había una burbuja en el cómic que afectaba sobre todo a Norma (1/3 menos de producción) y PDA (1/4 de lo que editaba?)
Las cifras de ventas serían muy importantes para comprar tebeos con vistas a la especulación, si es cierto eso de los 800 ejemplares. ¿Podría referirse a este comenatario encontrado en la web de la editorial (escribo el nombre de la editora y el comentarista al revés) ykinimo?
"Anónimo dijo...
Hola!! Acabo de comprar este album de Solo. Aunque ya he llegado tarde para el ex-libris, ¿os quedan existencias del album? Es que lo he pagado por Pay pal y quiero asegurarme. En caso afirmativo, ¿cuando llegara? muchisimas gracias.
nítraM oinotnA"
Se refiere al último álbum de la nueva serie (¡cojonudo!, con guión del propio Oscar Martín, y protagonismo colectivo).
Han creado una polémica rarísima; me esfuerzo y me esfuerzo, pero sigo sin ver ninguna referencia a la novelgraficosa en el texto del facebaqueo.
Breaking Bad en la gallega (segunda temporada). Sí que es chula.
Ismamelón Sobrino
Lord, tienes todas la razón. El comentario de ECC (muy habitual por parte de muchos editores) es absurdo. Leí hace poco (no recuerdo donde) que comentaban que el único que había dicho algo serio sobre el tema del secretismo y tal era David Hernando que señalo que no se decía nada para evitar dar información a la competencia que podría querer tus mismas licencias. No se, algo más de sentido que las absurdeces habituales tiene.
Ismael, el tema de la novela gráfica es que "ese sector" esta muy sensible y cuando Martín dice que aquello de los "gurus de la novela gráfica" ha sentado mal a mu cha gente. Pero vamos ese no es el fondo del mensaje ni creo que se le debiera dar tanta importancia.
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