En el antaño tan usado y últimamente casi olvidado, formato Absolute nos llega un recopilatorio de la serie limitada de tres números a cargo de Dave Gibbons y Steve Rude, World´s Finest, que narra un el enésimo encuentro entre Batman y Superman.
Steve Rude es un genio, con esta sencilla frase se pueden resumir las virtudes de este comic, es una lástima que para poder aprecia el trabajo de este artista en nuestro país haya que gastarse un autentico pastón (Nexus, Hijos del Átomo, La Tabla de la Vida etc, no son precisamente comics baratos), pero la verdad es que teniendo en cuenta lo poco que se prodiga merece la pena.
Dotado de un estilo clásico que en ocasiones se antoja casi obsesivo (su Spiderman ha de ser el de Ditko, su Capitán América el de Kirby, su Batman el de Kane etc), Rude es un maestro en la composición de pagina, en la narrativa, en el dominio de la expresiones, en el juego de contrastes, y de eso este Superman/Batman tiene mucho.
Juntar a estos dos personajes siempre resulta atractivo, a riesgo de recaer en el eterno tópico, lo cierto es que estamos ante los dos superhéroes más icónicos jamás creados, la luz de su Superman, tiene su reflejo en la oscuridad de Batman, ambos son complementarios y a la vez opuestos, juntarlos permite jugar mucho con esos contrates, y precisamente eso hace Gibbons; con una trama que en ningún caso da para tres números de 48 páginas (de hecho todo está resuelto antes de que acabe el segundo número), juega en todo momento y sin ningún tipo de disimulo con los oposición entre ambos personajes, y no solo entre ellos, sino también entre sus mundos, Gotham y Metropolis, Joker y Luthor, Clark Kent y Bruce Wayne (curiosamente aunque ambos fijen ser quienes no son en sus identidades secretas….lo hacen de manera totalmente opuesta), en este contexto introducir a Joker y Batman en Metropolis, y a Luthor y Superman en Gotham no es sino la consecuencia lógica del juego de las diferencias que es el comic, un juego eso sí, cargado de la carga icónica que ambos personajes y sus mundos consiguen transmitir, algo que Gibbons maneja muy bien.
Así tenemos un comic que pese a sus evidentes limitaciones argumentales (la simpleza de la trama es asombrosa), busca mostrar la carga icónica de Superman y Batman, algo que consigue en gran medida gracias a un sobresaliente Rude, que a desde las espectaculares primeras páginas con Gotham y Metropolis en toda su gloria, muestra lo interesado que está en dibujar este comic; sin embargo no conviene menospreciar la labor de Gibbons, que al igual que en su faceta de dibujante siempre se ha mostrado como alguien como mínimo inteligente y eficaz; Gibbons consciente de con quien colabora, explota al máximo sus virtudes y permite que su compañero su luzca, quedando él en un discreto pero vital segundo plano.
En fin un comic que merece la pena por el trabajo de Rude (acompañado eso si, por los más que eficaces Karl Kesel a las tintas y Steve Oliff al color, lo cual no es moco de pavo, no señor), que consigue mostrar todo lo que lleva dentro gracias a un guión que se le poner muy fácil, si no fuera por el precio y el formato merecería muy mucho la pena, en estas condiciones hay que pensarlo.
7 comentarios:
Es que como tú dices, ese formato... ese precio.... Yo me quedo con mi edición de Zinco y tan feliz.
steve rude es de los pocos dibujantes (si no el único) que me hacen comprar una obra independientemente del guión. Tiene una elegancia especial. Pena que el hombre se prodigue tan poco. No sé si es por la mala suerte que tiene con las editoriales, su ritmo de trabajo o su caracter "especial" que no le abre muchas puertas precisamente.
En cuanto al formato no entiendo el porqué no es el adecuado. ¿Cual es el problema?. El precio sí es elevado, pero bueno, es a lo que estamos acostumbrados, ni mas ni menos que otros absolute.
De todas maneras yo no picaré y seguiré con mi vieja edición de zinco, pero para todos aquellos que no la tengan oconsejo acercaros a vuestra tienda.
Yota, si tienes lo de Zinco esta claro, no hay color.
Leox, el "problema" con el formato, a parte de que condiciona (al encarecer)y mucho el precio, es que que a mi, desde un punto de vista personal no me gusta el formato absolute, no es como para no comprar un comic si este te interesa, pero desde luego no me hace mucha gracia, si yo tuviera lo de Zinco ni me lo pensaba vaya.
Pues yo me debo estar volviendo un radical, pero por mucho que me interese el comic, como este caso, que no lo he leido y me gustaría, no me compro un absolute. Ninguno. Afortunadamente la mayoria de cosas las tengo ya en formato tradicional.
No se, el formato absolute aunque caro no me parece tan sangrante como los BoM, asi que bueno más o menos trago, pero vamos entiendo tu actitud.
Yo sí me lo compraría, porque no tengo lo de Zinco, pero vaya, entiendo lo que decís, quizás mucho formato para un tebeo majo,entretenido, con un dibujo excepcional, pero que deduzco por tu reseña que no es una obra maestra. Saludos.
Claro, es justamente eso, es un buen comic, pero es demasiado formato para lo que este es en realidad.
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