lunes, 13 de febrero de 2012

Cosas Veredes 7.0: Before Watchmen y otras hierbas.

Se ha ido acumulando las noticias interesantes en el mundo del cómic a lo largo de las ultimas semanas y me apetece hacer un breve repaso por aquellas que más me han illamado la atención.

Before Watchmen: El anuncio por parte de DC de la producción de diversas miniseries ambientadas en el mundo de Watchmen a modo de precuela ha levantado no poca polvareda e indignación por la red, una red todo hay que decirlo muy tendente a indignarse por chorradas, pero eso es otro tema. Entrando en harina he de decir que bajo mi punto de vista DC esta totalmente legitimada para hacer lo que ha hecho, los personajes son suyos y puede hacer lo que quiera con ellos, fin de la discusión.... o no. Y es que según yo lo veo lo que denota todo esto es el estado actual de la editorial de Superman. Con unos New 52 que más allá de su indudable éxito comercial, parecen mostrar la total ausencia de una dirección editorial, lo que se palpa en los continuos cambios de equipos creativos o en el buscado retorno a lo peor de los 90, uno no puede dejar de preguntarse si autores del calado de Azzarello, Cooke o Huges no podían haber encontrado proyectos con otros personajes dentro de la propia DC que contribuyese a prestigiar la editorial en un momento tan bajo de credibilidad. Porque lo que a estas alturas esta claro es que Watchmen no es un cómic normal. Su significado e influencia en el género es lo suficientemente importante como para dejar las cosas estar. Se mire por donde se mire no tiene demasiado sentido retomar Watchmen veintitantos años después. Aún y con todo si hay que tener varias cosas claras: que estas precuelas sean buenas o malas, no afectan nada a la original, por otro lado hay autores de nivel implicados con lo que a lo mejor salen buenos cómics y todo y por ultimo Watchmen no es obra exclusiva de Moore. Gibbons (y Higgins) también tuvo algo que ver y no parece estar en contra de todo esto así que bueno, no creo que haya que dramatizar tanto.

Se nos va La Cárcel de Papel: He de decir que nunca he sido un seguidor fiel de La Cárcel, no por nada en especial si no porque la mayoría de los cómics de los que por allí se hablaba no solían ser de mi interés. Pero más allá de eso lo que esta claro es que tanto La Cárcel, como su creador; Álvaro Pons eran un símbolo ineludible de la blogosfera comiquera, como pionero de la misma en primer lugar, como uno de sus máximos estandartes en su época de mayor esplendor y ahora con su cierre como símbolo de que las cosas ya no son lo mismo y que poco a poco la blogosfera del cómic va perdiendo su esencia a la par que sus principales señas de identidad van quedando atrás. Ya sea por las redes sociales, ya sea por que hay gente que lleva (llevamos) muchos años en esto y ya se empieza a notar el cansancio lo cierto es que tengo la sensación de que la cosa cada vez va más para abajo. En fin, una lastima el cierre de La Cárcel de Papel que como siempre ha demostrado ser símbolo y reflejo del estado general de los blogs de cómics.

Gary Friedrich y el Motorista Fantasma: Todos los que estamos en este mundillo conocemos en mayor o medida la explotación editorial a la que fueron sometidos la mayoría de los autores de cómics hasta bien entrados los 80 cuando la conciencia de creador empezó a cobrar la fuerza que siempre debió tener. Todos hemos leído las historias sobre el maltrato a Siegel y Schuster en DC o el desprecio de Marvel a Kirby. En este contexto y con los contratos existentes en la época se antojaba bastante difícil que prosperase la demanda de Gary Friedrich a Marvel a cuenta de los derechos del Motorista Fantasma, personaje que pronto va estrenar su segunda aventura cinematográfica, por la que su creador (como siempre) no van a ver un duro. Lo que si resulta más sorprendente de todo esto es el afán vengativo de Marvel reclamando 17.000 dolares a Friedrich por la venta de guiones originales, 17.000 dolares que no tiene y que le pueden suponer un serio problema. Esa cantidad para Marvel es como para mi un céntimo, menos incluso, pero que para Friedrich es un mundo. Hay que ser mezquino para hacer eso, mezquino y vengativo y más con un tío que te ha creado un personaje con el que estas multiplicado esa cantidad por cada cómic, cada muñeco, cada película que basado en él se produce. Supongo que con esta actitud Marvel quiere lanzar un aviso a navegantes, un “no me toquéis los huevos u os hundo”, pero creo que a estas alturas hacer algo así solo te puede conllevar el desprecio de tus posibles clientes. Hay que tener más cuidado, una cosa es que legalmente los personajes sean tuyos, otra cosa que humilles a los creadores de esa manera, a veces quien juega con fuego se termina quemando.

jueves, 2 de febrero de 2012

Historia de un hombre sin miedo especial: El Daredevil de Andy Diggle III, Daredevil Reborn.

Miniserie de cuatro números que pone fin a la decepcionante etapa del británico Andy Diggle como escriba del destino del hombre sin miedo y que llega a España de la mano de Panini en un tomo formato 100% Marvel.

Tras todo el desastre que supuso Shadowland, si uno piensa cual ha de ser el siguiente paso con el personaje de cara a rehabilitarlo para que se puedan seguir publicando sus historias, la solución más obvia pasa por alejarlo de su entorno habitual para que, tras buscarse a si mismo se de cuenta de quien es realmente y decida regresar a su vida. Existen más caminos evidentemente, muchos muy complejos y desde luego pueden surgir soluciones sorprendentes que desafíen al lector. Por desgracia no es ese el caso de Daredevil: Reborn.

Diggle, probablemente condicionado por el fin de sus etapa y el relanzamiento del personaje, tomo en Reborn el mismo camino que en Shadowland: el fácil, el obvio, el menos interesante, Esta claro que a estas alturas no era esperable otra dirección, pero no deja de resultar decepcionante y más teniendo en cuenta el acreditado talento del guionista. Aún con todo, Daredevil Reborn, aunque trillado y previsible desde la primera página, resulta una amena lectura y se torna desde luego en lo mejor que el guionista de Los Perdedores ha realizado en Daredevil. A esto ayuda el dibujo de Davide Gianfelice, que salido de sello Vertigo (Northlanders) realiza un trabajo dinámico y expresivo que hacen del cómic una experiencia visualmente interesante.

Personalmente (y al contrario de lo que se dice en la introducción del tomo) encuentro en Reborn muchos más ecos de la miniserie de Miller y Romita Jr., El hombre sin miedo que no de Born Again. Al igual que en aquella nos encontramos con un Murdock alejado de su entorno natural (allí Boston, aquí un pueblo perdido de la América profunda), que gracias a un niño (una niña allí) termina sacando lo que en realidad lleva dentro y comportándose como un héroe. A esto se le añade claro el “no traje” que usa Murdock para enfrentarse a los malos claramente inspirado en el “chandal” que utiliza allí, por no hablar de que en Reborn también repele las balas con su bastón. Tenemos también referencias en aquel extraño Daredevil 219 donde con Miller a los guiones y John Buscema a los lápices se nos narraba una historia en la que Murdock (Daredevil, al igual que aquí y que en su particular año uno no salia en todo el cómic) llegaba a un remoto pueblo perdido de los Estados Unidos donde sacaba a relucir oscuros secretos e imponía la ley. Por último cabria señalar también la etapa de Nocenti y Romita Jr., como referencia ineludible de esta historia. Allí y tras la ordalía a la que Murdock era sometido por María Tifoidea, este decidía alejarse de Nueva York iniciando una etapa de vagabundeo por la América rural que le llevaba a desenterrar muchos esqueletos ocultos en los armarios de lugares en apariencia apacibles.

Todos estos ingredientes hacen que Diggle trace una historia interesante, que incide una vez más en el indómito carácter de Daredevil y que vuelve a señalar que, pese a que intente huir de lo que en es en realidad, nunca podrá hacerlo, sería como negarse a si mismo. En este aspecto Diggle demuestra conocer a Daredevil mucho mejor que su antecesor en los guiones, Ed Brubaker, el cual nunca pareció verlo como un héroe si no más bien como alguien mezquino e indeseable. Esto hace que uno se pregunte que hubiera pasado si el guionista británico hubiese gozado la libertad de sus antecesores pudiendo construir su etapa a su gusto, algo que por desgracia ya nunca sabremos. En fin sea como sea lo cierto es que con todo este Daredevil Reborn cumple de sobra aquello para lo que fue concebido: dejar al personaje listo de cara al enésimo relanzamiento programado desde la Casa sin Ideas. Relanzamiento que con gente como Mark Waid, Paolo Rivera o Marcos Martín implicada tiene muy buena pinta.