(viene del post de arriba)
Y lo que se asomaba en el horizonte era otro Jr, en este caso Mike Deonato, que por desgracia no contaba ni con una ínfima parte del talento del hijo del gran Romita Sr; Deonato que había alcanzado estatus de artista hot en los 90 y que se había visto apartado de al primera plana comiquera cuando la moda Image paso a mejor vida, regresaba ahora plagado de referencias fotográficas y con un gran dominio de los claroscuros, lo que no escondía sin embargo sus enormes limitaciones narrativas, con estas armas, JMS emprendía el camino a la que por entonces se antojaba como una de las sagas más polémicas de al historia del trepamuros, Pecados de Pasado.
Y en Pecados del Pasado fue donde asistimos a la segunda gran intromisión de los editores en el trabajo de JMS, la idea inicial del guionista pasaba por la aparición de dos jóvenes sorprendentemente parecidos a Gwen y Peter que estaban dispuestos acabar con la vida del segundo, a lo largo de la trama descubriríamos que en realidad eran los hijos de Peter y Gwen que esta tuvo después de fallecida y que habían crecido artificialmente por la radiación que Peter tenía en su cuerpo, la idea peligrosa de por si fue desechada por Marvel que sin embargo si se quedo con el concepto, proponiendo a JMS que en lugar de ser Peter el padre (Peter y paternidad eran dos palabras que en Marvel no querían ver juntas ni de broma), lo fuera su mayor enemigo Norman Osborn, y antes siquiera de JMS pudiera estudiar la propuesta, Marvel puso la maquinaria publicitaria en marcha anunciando Pecados del Pasado como el gran acontecimiento arácnido del año, JMS que en su momento había dicho que no permitiría que sus guiones se tocaran sin su consentimiento se veía ahora entre la espada y la pared, sus guiones no se habían tocado, ya que solo había realizado una propuesta, pero Marvel había puesto un evento en marcha sin esperar a conocer su opinión del asunto, en esa tesitura podía mandar todo a la mierda o tirar hacia delante y a ver que sale, opto por la segunda opción...y así salió.
Pecados del pasado es un mal comic, más allá de la estéril polémica sobre si mancha o no el recuerdo de Gwen, la historia encaja con alfileres en la continuidad no resulta creíble y lo que es más relevante, no parece que sus propios autores se la crean, las criticas fueron demoledoras (y las ventas...aunque en este caso para bien de Marvel), y JMS realizaba su primer gran borrón en su ya larga etapa al frente del trepamuros, tras Pecados del Pasado y como para tomarse un respiro, tras tanta polémica JMS realizo una historia sin demasiada trascendencia que antecedió a la tercera gran intervención editorial en su etapa al frente de la colección.
Por unas razones o por otras a la altura del 2005, los Vengadores no vendían una mierda, Quesada y su troupe habían revitalizado Spiderman, los X-Men y habían creado el Universo Ultimate, en todo este proceso la parte más clásico del Universo Marvel (aquella simbolizada por 4F,Vengadores y afines) parecía haber quedado un tanto olvidada, para solucionar el asunto desde Marvel no tuvieron mejor idea que entregar a Brian Michael Bendis (una de las estrella de la editorial) las riendas de los héroes más poderosos de la Tierra, y Bendis tan buen guionista de género negro como mediocre de superhéroes tuvo la “feliz” idea de destrozar a los Vengadores solo para volver a reformarlos desde cero....y en ese “desde cero” entraba Spiderman.
De repente y casi sin comerlo ni beberlo, JMS se encontró con Spiderman como vengador y con él, May y Mary Jane viviendo en la torre de los Vengadores, JMS lidio como pudo con la situación, haciendo en realidad un magnifico trabajo; JMS desarrollo las relaciones entre Peter y Tony (Iron Man) Stark, haciendo de este el mentor del primero y forjando una relación de respeto y amistad (e incluso un nuevo y horrible traje/armadura para Spidey, diseñado por Tony), que lamentablemente se vería disuelta por la Civil War, tal vez lo más curioso de esta saga fue que era en Spiderman y no es los “bendisores” donde pudimos disfrutar de unos Vengadores en estado puro, así mientras que Bendis se dedicaba a escribir una historia que parecía ir a algún lado, pero que no terminaba de llegar, JMS bordo en una sola saga lo que se suponía debía ser un comic protagonizado por un comic de superhéroes: acción a raudales, amenazas mundiales, caracterización de personajes y relaciones interpersonales, todo lo que New Avengers no tenía lo tenía Spiderman en esta saga...claro que el tema era que Amazing debía ser una colección de Spiderman no de los Vengadores.
Finalizada esta saga, JMS tal vez harto de las intervenciones editoriales decidió retomar en cierta medida la trama totémica y escribir su propia historia, algo que conseguiría solo a medias, y es que El Otro, la saga destinada a redefinir a Spiderman, quedo completamente coja desde el momento en el que se torno en crossover entre todas las cabeceras arácnidas y no quedo solo en manos de JMS, así la saga que supuso el renacimiento (literal) de Spiderman (con toda una serie de nuevos poderes), en la que Peter asumió por primera vez y de manera plena su parte arácnida, se convirtió en un batiburillo en el que JMS estuvo magnifico, Peter David (responsable de Friendly Neighbour Spiderman) estuvo cumplidor, y Reginald Huldin (responsable de Marvel Knights: Spiderman) dio vergüenza ajena, el resultado fue una saga que dio mucho menos que del potencial de la idea se podía esperar, al menos la saga sirvió para alterar el estatus quo del personaje, poniéndole en una nueva situación que los acontecimientos futuros apenas si permitió aprovechar.
Y es que en el horizonte asomaba Civil War (al menos para esta saga y la que vendría despues JMS volvió a contar con un magnifico dibujante Ron Garney), resulta curioso observar como en gran medida la etapa de JMS al frente de Spiderman es una clara radiografía de la etapa de Quesada al frente de Marvel, en un primer momento mucha libertad para los autores y un universo que apenas se interrelacionaba (daba igual que Thor plantar Asgard en New York o que Kang conquistase al Tierra en los Vengadores, más allá de esas series a nadie parecía importarle), después una paulatina pero decisiva intervención editorial tocando cosas aquí y allá, y por último Quesada descubrió los crossovers; pasando de un extremo a otro, el crossover anual se convirtió en algo de obligado cumplimiento y la continuidad se entendió como la mera perpetuación del cruce de colecciones. En este contexto Civil War iba a ser el padre, la madre e incluso la abuela de todos los crossovers, los héroes se iban a dar de ostias por aquello de quítame allá una firmita, y Spiderman debía posicionarse, o con Iron Man, al lado del gobierno como héroe registrado, o como rebelde al lado del Capi luchando por su libertad individual.
El asunto quieran que no tiene su aquel, la identidad secreta ha sido siempre un motor clave de la franquicia arácnida, el temor a ser descubierto y poner a todos sus seres queridos en peligro ha movido a Peter a hacer casi de todo para mantener su secreto a salvo, pero si ha habido otro motor clave en la strip este ha sido sin duda la responsabilidad, y es que la frasecilla de “todo gran poder conlleva gran responsabilidad”, ha estado marcada a fuego en el personaje desde su nacimiento, así Civil War ponía a Peter ante la tesitura de elegir entre su identidad y su responsabilidad, optando finalmente por lo segundo, a lo que contribuyo sin duda sus excelentes relaciones con Iron Man, relaciones que tan hábilmente había construido JMS en los meses pasados.
Y aquí pasamos a la cuarta gran intervención de la editorial en los planes de JMS, Civil War era un evento construido a base de golpes de efecto, muchos fuegos artificiales y poca chica, y no podía haber un golpe de efecto mayor que hacer pública la identidad secreta de Spiderman, lo cual sin duda resultaba bastante más problemático que el mero registro, ya que una cosa es dar tus datos al gobierno y otra cosa es dárselos a todo el mundo, sea como sea lo cierto es que JMS (uno de los arquitectos de la Civil War, aunque más por imposición que por deseo propio), acepto el desenmascaramiento, pero en contra de sus deseos este no se produjo en Amazing Spiderman, si no en Civil War, en concreto en su número 2, la decisión de Marvel, aunque lógica, no dejaba de ser una putada para JMS que veía como perdía definitivamente el control sobre el personaje.
De esta forma y con Spidey del lado del gobierno, teníamos a un héroe feliz y con el respeto y respaldo del público, pero claro como esto no podía ser, la situación pronto cambio, y es que Spidey descubrió el destino de los héroes detenidos que se negaran a registrarse, ni más ni menos que una prisión en la Zona Negativa donde estarían de forma indefinida sin derecho a representación legal o a juicio (vamos, un Guantánamo marvelita), en estas, el sentido de la responsabilidad de Spiderman volvió a entrar en juego, y este se revelo contra Tony (retratado por JMS como un cabron manipulador con una caracterización y diálogos a años luz del resto de la saga), rompiendo así una relación que tan bien había sabido construir, pasando al bando del Capi, y por tanto encontrándose en el bando perdedor al final de Guerra.
Desenmascarado, sin trabajo, sin apenas aliados, perseguido por sus antiguos amigos, por el gobierno y por todos los criminales habidos y por haber, Spiderman se encontraba tras el final de la Civil War en una situación tan interesante como problemática, de la que se veía difícil salida, las consecuencias de todo esto se narraron en la que sin miedo a equivocarme señalaría como última saga de JMS al frente del trepamuros, Back in Black (con el regreso del traje negro, por aquello de que Spiderman estaba muy jodido y el traje reflejaba el estado de su espíritu....si una chorrada de excusa pero como el traje negro mola tampoco es cuestión de quejarse), la saga que se iniciaba con el disparo a la Tia May por parte de un francotirador pagado por Kingpin para matar a Spidey, mostraba en toda su crudeza el lamentable estado en el que se encontraba el arácnido, y se centraba en la búsqueda del culpable del disparo a su tía y en la brutal represalia que Spidey da a Fisk, una saga muy bien escrita en la que puedes sentir la angustia e impotencia de Peter, pero que no parece dejar ninguna vía de escape para el nuevo estatus del personaje.
Por desgracia si hubo vía de escape vía One More Day, pero eso (que supondría la quinta y definitiva gran intervención editorial en el trabajo de JMS) queda para otro día, echando la vista atrás y haciendo un balance global de la labor de JMS al frente de Spidey, este no puede ser más que positivo, y es que su trabajo que alcanzaría el sobresaliente (e incluso la matricula de honor en algunas fases de su etapa con Romita Jr), si pudiéramos obviar Pecados del Pasado y One More Day, pasara sin duda a la historia como una de las más brillantes etapas en una colección plagada de etapas brillantes, desde un punto de vista netamente personal lo mejor del Spidey de JMS fue que recupero el gusto por la lectura mensual, cada número era sólido en si mismo (parece mentira que hablemos del mismo tío que en Thor es la quinta esencia del decompressive storytelling) y la espera para el siguiente se hacia eterna, la magia de la grapa alcanzó su plenitud con el Spiderman de JMS (sobre todo en su etapa con Romita Jr), y solo por eso su trabajo merece muy mucho la pena.
"JMS lidio como pudo con la situación, haciendo en realidad un magnifico trabajo; contando de nuevo con un dibujante competente (Ron Garney)..."
ResponderEliminarPequeña errata Fer. Deodato es el autor de estos numeros. Garney no entra hasta el prólogo de Civil War.
Por lo demas excelente retrospectiva.
FOXXXXXXXXXXXXX
Fallo "tesnico" ahora mismo lo corrigo, por lo demás muchas gracias.
ResponderEliminarPues a mi, Pecados del pasado no me parece tan mala. Sí, es inferior a lo peor de la etapa JMS/JRjr, mancha el recuerdo de Gwen, y fuerza algo la continuidad (aunque no nos engañemos, no mucho más que todos los comentarios de "ha pasado un año, cuando hacen referencia a algo ocurrido 12 números atrás), pero aún con todo, se deja leer, y tiene un par de momentos buenos.
ResponderEliminarYo estoy con Ricky, esa saga se considera mala porque hablamos de Gwen y de Norman, pero, ¿y si la misma saga se hubiera dado en una nueva colección sin personajes mitificados como Gwen? La saga de pecados del pasado es buena, aunque no guste lo que se propone en ella.
ResponderEliminarYo la verdad es que hubiera preferido a Peter como padre, pero como he dicho antes la historia de dicha saga está por encima de la media.
Saludos
Ricky y Alberto, yo creo que Sins Past es un mal comic, por que:
ResponderEliminar- es innnecasario y no aporta nada al personaje (si el padre hubiera sido Peter el asunto hubiese cambiado mucho)
- no encaja ni con cola,en la continuidad del personaje
- creo que, que el Duende Verde matara a Gwen solo por hacer daño a Peter daba más fuerza a su odio mutuo y encajaba más con el sentido de la responsaiblidad de Peter(aquello de tener la culpa de todo), habiendo detras de todo un motivo oculto, pienso que se desvirtua un poco la rivalidad entre ambos
Dicho todo esto, si es verdad que es un comic escrito con garra, que tiene algún buen momento y que a veces consigue mantener la tensión, pero viendo de lo que es capaz JMS, esto no justifica las pegas anteriores, más que nada por que antes ya había conseguido todo eso sin necesidad de contar una historia así.