martes, 31 de julio de 2007

Sin City: Ese Cobarde Bastardo

Todo parecía perdido tras un más que prometedor inicio, Sin City llevaba bajando de nivel de obra en obra, Miller parecía no tener nada que contar y la obra sin llegar todavía a languidecer si amenazaba con convertirse en un manchon en la carrera del autor norteamericano ya que la tendencia parecía clara...y en entonces llegó Ese Cobarde Bastardo.

Publicada originalmente en forma de miniserie de 6 números entre 1995 y 1996, Sin City: Ese Cobarde Bastardo supone la cuarta incursión larga de Miller en su Ciudad del Pecado.

Se ha dicho en muchas ocasiones que las mejores obras de Miller son aquellas que te agarran por el cuello desde el principio y no te sueltan hasta que terminas su lectura, no apelan a la cabeza, al ser racional, si no que apelan al corazón, a las visceras: bajo este punto de vista Ese Cobarde Bastardo, es sin duda uno de los mejores trabajos de Miller.

La obra vuelve (como en sus mejores trabajos) a reflejar todas las obsesiones del autor americano, el “héroe” incorruptible con una moral a prueba de bombas, el mal insondable e intocable, corrupto en su esencia, impoluto en su forma, el sacrificio definitivo etc. La principal diferencia con otros Sin City, es que Hartigan protagonista de la obra, si es en este caso un autentico héroe, un hombre que no busca la venganza o la retribución si no que solo quiera salvar al menos la vida de una niña, un policía honesto e integro en una ciudad donde serlo es un casi un pecado (bajo este prisma estamos de nuevo ante un clásico del género negro, un policía honrado que trata de hacer las cosas bien dentro de un sistema corrupto hasta la medula), Hartigan se convierte así en el prototipo de héroe (en el pleno sentido de la palabra) “milleriano”, duro, honesto, fuerte y con una resistencia sobrehumana, esta dispuesto a lo que sea necesario para hacer las cosas bien aunque ello implique la perdida de algo más que su vida en un sentido físico.

La historia se inicia cuando Hartigan apenas a unas horas de jubilarse descubre una pista sobre el secuestro de una niña de 11 años por parte de Roark Junior, un cruel y bienparecido violado, maltratador y asesino, que ha sido responsable de la muerte ya de varias niñas. Hartigan pese a los ruegos de su compañero decide intervenir, salvando la vida a la niña y dejando medio muerto a Junior, a partir de ahí la vida de Hartigan se acaba, el padre de Junior, el todopoderoso senador Roark, utiliza toda su fuerza y poder político para acusar a Hartigan de todas las muertes de las niñas, además se le amenaza con que si cuenta la verdad toda su familia y amigos serán brutalmente asesinados, Hartigan calla. Hartigan se queda solo su familia y amigos dispuestos a ayudarle interpretan su silencio como síntoma de culpabilidad, y así Hartigan es condenado a la más horrible de las cárceles victima de la más horrible de las torturas (Miller vuelve a mostrar aquí su desconfianza en el poder, no ya tanto en la figura del senador Roark como si en la del sistema judicial que Miller presenta una vez más como cómplice y lacayo del poder establecido), sin embargo y pese a todo ello se niega a firmar la confesión de culpabilidad, podrían falsificar la firma, podrían amenazar a su familia, pero no, quieren doblegarle, quieren que se rinda, Hartigan se niega a renunciar a su última parcela de libertad (un rasgo también común a muchos personajes millerianos) y por delate le esperan ocho largos años de tortura y cautiverio, donde solo las cartas de Nancy (la niña que salvoque firma bajo el nombre de Cordelia para protegerse), le sirven para mantener la cordura.

A partir de ese momento se desencadena la segunda parte de la trama, Junior, desfigurado, horrible y amarillo (por eso el That Yellow Bastard del titulo original), reaparece en la vida de Hartigan, sobrevivió a su encuentro, pero quedo profundamente marcado, horriblemente desfigurado, es curiosos de nuevo como Miller juega con los tópicos de maniqueísmo, Junior, representante del mal absoluto en la obra, aparece primero con un joven bien parecido, el diablo con disfraz de ángel, sin embargo tras su encuentro con el bien absoluto (representado en este caso por Hartigan), ya no puede mantener la fachada y su propio cuerpo se convierte en un reflejo de la maldad y deformidad de su alma. Sea como sea, su aparición preludia el desastre, ya que da a entender a Hartigan que ha descubierto quien es la misteriosa Cordelia y este desesperado, firma la confesión de culpabilidad buscando y consiguiendo salir de la cárcel, a partir de ahí Hartigan busca a Nancy a la que localiza en el bar de Sin City, Nancy no es otra que la stripper que ya ha aparecido en otros Sin City, sensual, preciosa el trazo de Miller, (que en esta obra vuelve a ser majestuoso alejándose del feísmo de la dos anteriores y superando en fuerza a El largo adiós), parece cobrar vida en las curvas y la belleza de Nancy, que reconoce a Hartigan de inmediato, le cuenta que esta perdidamente enamorado de él (Hartigan vuelve a mostrar su calado moral, tan tipico de los héroes millerianos, al negarse acostarse con Nancy de la que podría ser su abuelo), que en todo este tiempo no ha podido olvidarle, es entonces cuando se descubre la trampa, han dejado salir de la cárcel a Hartigan para descubrir quien es Codelia y matarla, de nuevo Hartigan ha de rescatar a Nancy de las garras de Junior, pero en esta ocasión la cosa será distinta, pondrá a Nancy a salvo definitivamente, no puede haber dudas “un viejo muere, una joven vive, un trato justo”, un disparo, fin. Miller que grande eres.

viernes, 27 de julio de 2007

Actualización comic Marvel inéditos (hasta 2004) X.

Hacia un tiempecito que no actualizaba el post de comic inéditos, ahora de nuevo gracias a la ayuda de los foreros del Universo Marvel Hellpop, Omoloc y el Capi de Hierro aprovecho para hacer una nueva (mini) actualización con los siguientes comics:


Hulk annual 2000

She-Hulk Vol. II número 47

Namor 7-12 (2003)

Namor The Subamariner 36-47 y 49-62

Nick Fury, Agent of SHIELD vol.2 24 y 26-47

Cada vez va quedando más completo, queda todavía mucho (sobre todo en el apartado de los What if?, que esta muy incompleto), pero poco a poco va quedando mejor.

Los Leones de Bagdad.

Como hoy no tengo demasiado tiempo aprovecho para recuperar una reseña que hice para comixaría de uno de los comics que con más ganas esperaba este año, Los Leones de Bagdad que recientemente a publicado Pda en un bonito formato.

Año 2003 durante el bombardeo de Irak, cuatro leones escapan del zoo de Bagdad, este hecho en principio no demasiado relevante es usado por Brian K Vaughan y Niko Henrichon, para plantear una interesante propuesta en torno a los limites y el concepto de la libertad así como sobre las formas de obtenerla, en una nada disimulada referencia a la situación de Irak.

Vaughan, que ya ha demostrado su enorme capacidad para introducir tramas políticas en su comics (ahí están obras del calado de Y, The last Man o Ex Machina), recurre al tradicional formato de la fabula para a través de unos animales (en este caso leones) humanizados, mostrarnos los diferentes planteamientos que en torno la libertad recién obtenida surgen, así las diferentes posturas irán desde el temor de la más veterana que añora la seguridad del zoo y recela del nuevo mundo que se abre ante ellos, a las ansias y ganas de libertad de la leona más joven que si acaso duda de una libertad que no han obtenido ellos mismos si no que ha sido otorgada a la fuerza, todo ello pasando por la expectante atención del macho de la manada y la excitación del cachorro para el que todo es nuevo y maravilloso, un panorama de puntos de vista que sin duda abre todo un abanico de posibilidades en torno al ya de por si interesante planteamiento de la obra.
El comic bien escrito y manejado, peca de algo que en otro tipo de relato tal vez sería virtud pero que en lo que se supone pretende ser una fabula se convierte en un claro defecto que limita el potencial de un tebeo que a priori contaba con todos los visos (por planteamiento y autores) de convertirse en una obra maestra, y es que Vaughan, no se moja en ningún momento, se limita a plantear las cosas sin conducir la situación hacia ningún lado y la “moraleja” final, no puede ser más desordenada y confusa, las fabulas son ante todo cuentos moralizantes, con una moraleja clara y diáfana que por muy discutible que pueda ser nunca ha de mostrarse ambigua, Vaughan al utilizar en forma y fondo la estructura de una fabula clásica y por contra mostrarse ambiguo y timorato en la conclusión falla estrepitosamente a la hora de plantear un comic que por potencial podía haber ido mucho más allá.

No se puede decir lo mismo de Niko Henrichon, autor poco prolífico, pero que en este comic realiza un trabajo sensacional en todos los aspectos, inspirado en esa magnifica película de la Disney que es El Rey León, Henrichon, convierte el comic en un espectáculo visual que ya de por si justifica la existencia de esta obra, una lastima que el guión no esta a la altura de su trabajo ya que si no estaríamos ante una autentica maravilla con cotas de calidad difíciles de alcanzar.
Como conclusión, solo cabría decir que si bien Los leones de Bagdad, es una obra magníficamente dibujada y con un planteamiento con infinitas posibilidades, la “cobardía” de su autor y su misma indefinición, la transforman en una obra si no mediocre si muy lejos de lo que cabría esperar, una lastima, y una de las más grandes decepciones del año, y es que realmente el comic lo tenía todo para ser mucho más de lo que finalmente a resultado ser.

jueves, 26 de julio de 2007

Daredevil: Historia de un hombre sin miedo. Parte XLIII: Daredevil Love and War.

Terminado de momento el apartado de las miniseries le toca el turno ahora a las novelas gráficas y para empezar nada mejor que una obra con guión del autor que cambio para siempre al personaje: Frank Miller.

Publicada originalmente en 1986 dentro de la serie Marvel Graphic Novel (formato con el que Marvel pretendía ampliar su publico con un tipo de comics que por forma y fondo pretendían ser más “adultos”), en España hubo que esperar a 1992 para verla publicada (en su por el momento única edición si no me equivoco) dentro de la colección Novelas Gráficas de la extinta Forum, en concreto en su número 8, una edición bastante digna que costo 825 pesetas de la época.

La obra contaría con guión de Frank Miller, autor sobre al que poco más se puede decir a estas alturas más allá de que (en el caso que nos ocupa) su labor supuso un antes y u después en la historia del personaje, personaje al que volvería en este año no solo para realizar esta obra si no también su insuperable Born Again junto a David Mazzuchelli, en lo que al dibujo se refiere tenemos a otro de los grandes genios de la época ni más ni menos que Bill Sienkiewicz, un autor muy alejado ya a estas alturas del clon de Neal Adams que se pudo ver en los primeros números del Caballero Luna, un autor con un estilo de dibujo experimental, casi surrealista, que no solo ha marcado a grandísimos autores que han venido después (Mack o Maleev son solo algunos ejemplos), si no que demostró que no por hacer un dibujo totalmente distinto a lo que se espera en función de las convenciones del género se ha de ser ni mucho menos un mal narrador, en este aspecto Love and War es un claro ejemplo de ello, con un Sienkiewicz acertadísimo en todos los aspectos, nunca Kingpin ha parecido tan grande y poderos y la vez tan vulnerable, nunca un psicópata ha conseguido causar tal sensación de inquietud , nunca DD ha parecido (en contraste con el mundo que le rodea) tan luminoso e icónico, nunca Vanesa a estado tan bella y vulnerable, en fin un trabajo delicioso que solo merece palabras de elogio.

Entrando en harina la obra se sitúa cronológicamente en plena época Miller en la colección después de que Fisk recuperase a su esposa Vanesa, la historia relata la llegada a Nueva York de un eminente psiquiatra europeo contratado por Fisk para curar a su esposa de su estado de catatonia casi permanente tras su regreso, Fisk decide para motivar al psiquiatra y que no se tome el caso como algo personal y no como un mero encargo, secuestrar a su esposa (una mujer ciega, bellísima, bajo el lápiz de Sienkiewicz) diciéndole que mientras que Vanesa no se cure el no recuperara a su esposa y así dejando claro que al curar a Vanesa lo que esta haciendo es recuperar a su propia esposa, para el secuestro Fisk recurre a autentico psicópata que se obsesiona con Cheryl (la mujer del psiquiatra) y más cuando Daredevil (que como no podía ser de otra forma interviene en la situación con la involuntaria y forzada ayuda de Turk que de nuevo ejerce de contrapunto cómico en una historia bastante tensa) la rescata y pretende hacer lo mismo con su marido.

El argumento podría haberse integrado perfectamente e la serie regular del personaje si no llega a ser por que la presencia de Sienkiewicz que pedía gritos un proyecto especial, sirve a Miller para plantear una interesante cuestión, y es que si bien en los comics de Miller el maniqueísmo más crudo suele estar presente con la presencia de un mal insondable todopoderoso y casi inabarcable, en Love and War ese mal, simbolizado por Fisk, muestra una debilidad muy humana, el amor casi irracional por Vanesa, un amor que aunque ya visto en la etapa del guionista en la serie regular aquí se torna mucho más trágico ante la resolución de los acontecimientos, así Fisk aparece como un ser mucho menos temible, débil incluso, muy lejano de la figura casi intocable de Born Again o de la anterior etapa de Miller en la serie, sin embargo y pese a esto Fisk continua dirigiendo con mano de hierro su imperio (impagable la escena en la que ordena varios asesinatos mientras observa los avances de Vanesa en un pantalla) y no duda en secuestrar a la esposa del psiquiatra para “motivarle”, lo que deja a las claras la clase de persona de la que estamos hablando, y lo difícil que ha de ser soportar o tener el amor de alguien así; destacable también por otra parte, resulta la figura de Victor el psicópata encargado del secuestro, el cual se enamora (o cree enamorarse) perdidamente de su victima, pero con la diferencia o como contraste con Fisk de que él si esta más que dispuesto a hacer daño al objeto de su pasión, Miller muestra aquí dos formas de amar en apariencia diametralmente opuestas, pero en realidad opresivas y dañinas por igual para las personas objeto de ese amor, en una juego muy inteligente en referencia al titulo de la obra ya que para Fisk y Victor todo parece valer en el amor y en la guerra.

En definitiva una obra tal vez menor dentro de la carrera de Miller que se ve enormemente enriquecida por la labor de Sienkiewicz y que sirve ante todo para profundizar en la mente y obsesiones de un Fisk cuya presencia en el comic no es excesiva pero que si se intuye en cada página.

miércoles, 25 de julio de 2007

El Jueves ¿rectifica?.

Todavía colea el tema del secuestro del Jueves por la blogosfera (no solo por aquí vaya, pero nos entendemos), y el semanario vuelve ahora a la carga con una “rectificación” genial, cargadada de mala leche e ironía,

Aprovechando que el Pisuerga pasa por Valladolid, quería aclarar un tanto mi postura sobre todo lo que ha pasado, lo que más me ha molestado del asunto, no ha sido la intervención de la fiscalía, o que el Jueves tenga ahora que hacer frente aun juicio, eso entra dentro de lo normal, es decir si la fiscalía aprecia indicios de delito contra la institución monárquica (yo no los veo, pero claro ni soy jurista ni es el tema) me parece normal que actué de oficio y se inicie un proceso judicial en el que el Jueves (como todo hijo de vecino) será inocente hasta que se demuestre lo contrario, y después en todo caso tendrá que hacer frente a la sentencia pertinente si procede, y hay esta se acaba el tema, eso entra dentro del juego democrático, y el Jueves ha tenido que acudir a juicios por temas similares otras veces.

No el problema no es ese, el problema es que la revista se ha SECUESTRADO, lo que para empezar ya hace presuponer que es culpable antes del juicio, lo cual es antidemocrático, para seguir si eso no es censura pura y dura se le parece mucho, para continuar, ¿en pleno año 2007 la policía yendo quiosco por quiosco a recoger ejemplares de una revista?, la verdad es que esto es lo que ha sido lo peor de todo esto, y es que ya digo si hay indicios de delito que se actué, haya un juicio y si se le declara culpable que la revista afronte las consecuencias, ellos mismos han dicho que saben que en muchas ocasiones juegan al limite, pero, ¿un secuestro?, ¿a estas alturas de la vida?, no me entra en la cabeza, no solo por que a conseguido justo lo contrario de lo que pretendía (la famosa portada esta ahora hasta en la sopa), si no por se trata de una acción profundamente antidemocrática y cercenadora de las libertades que no tiene cabida en pleno siglo XXI.

Decía el otro día que había apoyar al Jueves, más allá de que se este de acuerdo o no con la portada, se la considere o no insultante, lo cierto es que una reacción firme de la sociedad frente a estos hechos hará que de cara a un futuro se tenga muy mucho cuidado antes de secuestrar una publicación, juzgándola así culpable antes de que sus autores puedan defenderse.

Pda/DC: Nuevo Plan Editorial y van...

Bueno pues llega un nuevo plan editorial de Pda para su línea de DC comics...el tercero ya este año si no me equivoco y también el que mejor pinta tiene.

Si el anterior plan editorial abarcaba los meses de Mayo a Agosto ahora le toca el turno a los últimos meses del años de Septiembre a Diciembre, la verdad es que no veo a cuento de que tanto fraccionamiento, en mis tiempos (jo, que viejo me siento) los planes editoriales eran anuales y se cumplían más o menos a rajatabla, pero claro viendo como esta el panorama (a esas alturas lo más parecido a un plan editorial que Panini ha ofrecido a sus clientes ha sido el checklist de la Civil War, se ve que para la editorial italiana, lo de la trasparencia informativa paso a mejor vida junto a la Panini Comics News), tampoco es para quejarse demasiado.

Entrando en harina, la verdad es que el plato fuerte se lo lleva Batman, y es que esta claro que una personaje capaz de aguantar durante años una serie regular de 4 números a 10,50 e, es un superventas seguro a poco que se le trate de manera adecuada. De lo que se anuncia la verdad es que me llama casi todo, la antología de los villanos, tiene muy buena pinta, al igual que los tomos de Matt Wagner a los que hace tiempo que ya les tenia ganas, también me llama mucho ese Arkham Asylum de Morrison y McKean que no he tenido la oportunidad de leer, lastima de formato absolute, por lo demás y además de los tomos de Neal Adams (de nuevo en absolute), lo que más me ha ilusionado es la posibilidad anunciada por el bot de sacar en un solo tomo los tres primeros arcos de Gotham Central que en su día no pille a Norma, esto unido al CDC: Batman que se anuncia para el año que viene, la serie regular los archivos y demás, dejan a las claras que el personaje goza de un gran momento en nuestro país.

En cuanto al otro gran icono de la editorial, Superman (¿por que hablan de trinidad cuando deberían hablar de dueto?). poco cosa la verdad solo me lama la llegada de Donner a la serie regular a ver que tal.

En cuanto al resto del Universo DC, pues destaca sobre todo lo relacionado con la JLA y la JSA, de la primera además de la llegada de la esperadísimas (al menos por mi) series de Meltzer y Ross, me llama también el tochaco de JLA: Encarnaciones, sobre la JSA, concluye por fin la serie de tomos, y se inicia la grapa de Johns, hombre, si sigue el mismo tono no será la repanocha, pero como mínimo esta bien , de lo demás poca cosa, a o mejor lo de Lobo, pero no creo que lo pille.

En cuanto a Clásicos DC, con el final de la JLA/JLE y del Cuarto Mundo de Byrne, solo me llama ese Mister Milagro de Rude y el Demon de Kirby (además claro de lo de Neal Adams y José Luis García López, si es que se puede incluir en esta línea), de lo demás a lo mejor le hecho un ojo a lo de la JSA pero lo dudo.

Bueno en definitiva un plan que sigue la línea marcada con el fin de las Crisis Infinitas, y que parece mostrar que para bien o para mal (para bien creo yo), Pda tras tantos bandazos y meteduras de pata, ha encontrado el rumbo, bueno, ahora, y ya que ha costado tanto, que no lo pierdan.

viernes, 20 de julio de 2007

¿Vuelve la censura?

No posteo noticias en este blog, nunca, pero no, esto, no podía dejarlo pasar, ¿en que país estamos?, ¿esto es una democracia?, ¿vuelve la censura?, desde este modesto blog quisiera expresar todo mi apoyo a la gente de El Jueves puede que no valga de mucho, pero creo que no puedo ni debo quedarme callado ante algo así, algo que se antoja como más propio de otras épocas, épocas mucho más grises (que por suerte no me toco vivir) que de pleno año 2007, no es la primera vez que pasa algo así en "democracia", pero tal vez si todos aportamos nuestro granito de arena, si sea la última.

Actualización..Comunicado de El Jueves.

Escribimos esta nota el viernes, 20 de Julio de 2007, a las 19h. Tenemos la redacción llena de medios de comunicación que nos preguntan el por qué del secuestro de la revista. No sabemos qué responderles. El Jueves ha publicado decenas, cientos de dibujos sobre la familia real ( y sobre políticos, famosos, la ETA y todo lo que se mueve). Incluso hemos publicado un libro, TOCANDO LOS BORBONES, un tomazo de 350 páginas que recopilaba los dibujos más divertidos.

Somos humoristas gráficos y trabajamos conscientes de que nuestra obligación, lo que nos piden los lectores, es que exploremos el límite de la libertad de expresión. Podemos aceptar que, incluso, en alguna ocasión, lo podamos traspasar . Gajes del oficio. Si nos pasamos para eso están los tribunales pero…¿un secuestro? ¿ la policía recorriendo los quioscos de todo el país retirando nuestra revista? ¿ De verdad escribimos esto el 20 de Julio del 2007?

jueves, 19 de julio de 2007

Sin City: La Gran Masacre.

En 1994 y con un toque ligeramente “tarantiniano” llego la tercera miniserie de Sin City con el más que apropiado titulo de La Gran Masacre, Miller ahonda en la chicas del Barrio Viejo y recurre de nuevo a la figura de Dwight como protagonista masculino de la obra.

Publicada en forma de miniserie de cinco números entre 1994-1994, La Gran Masacre, permite ahondar tanto en la figura de Dwight, como en la de las chicas del Barrio Viejo, conociendo de esta forma más elementos de su pasado y dotando así de mayor tridimensionalidad a la Ciudad del Pecado.

Por primera vez Miller, no recurre a un protagonista nuevo si no que reutiliza a personajes ya conocidos de las miniseries anteriores, así Dwight se convierte en la sempiterna voz en off tan característica de los trabajos de Miller, y así a través de él conocemos la historia de las chicas del Barrio Viejo, tras años esclavizadas en manos de la mafia y de la policía corrupta las chicas habían conseguido independizarse y jugar según sus propias reglas, la tensa tregua que mantienen con la policía y la mafia (casi una misma entidad en Sin City) amenaza con venirse abajo cuando un condecorado y heroico (lo que en Sin City, quiere decir un violento y corrupto hijo de puta) policía, que intenta sobrepasarse con una de las chicas acaba muriendo (de manera muy truculenta y con un punto muy “tarantiniano”) a manos de la “letal y pequeña” Miho (que hace más que nunca honor a su nombre), Dwight responsable en parte de le llegada del poli al Barrio Viejo, se ve obligado a ayudar a las chicas a deshacerse del cadáver para evitar que la policía (y con ellos la mafia) entre a sangre y fuego en el barrio y se haga de nuevo con su control, de nuevo los ecos de la obra maestra de Tarantino (Pulp Fiction) se dejan sentir en la esperpéntica huida hacia delante en busca de un modo de deshacerse de un cadáver que parece resistirse a desaparecer, así entre idas de olla de Dwight, traiciones imprevistas y situaciones limite, la historia desemboca en un incidente al más puro estilo "desfiladero de las Termopilas" (preludiando así 300, el magnifico comic de Miller), donde para salvar su mundo las chicas acometen La Gran Masacre a la que hace referencia el titulo, y así muerto el perro se acabo la rabia.

Si El largo adiós podía pecar de simplismo (aunque gran parte de su encanto residía en eso, en lo simple y potente de la historia) y Mataría por Ella pecaba de excesivamente alargada, La Gran Masacre peca de todo eso junto y de mucho más, la historia más simple que el mecanismo de un sonajero, desemboca en un brutal incidente que se podía haber orquestado desde el principio y así evitar tanto esperpento, por otra parte si en los dos anteriores Sin City podíamos ver muchos de los elemento que había hecho grande a Miller, en La Gran Masacre caso todos están ausentes, no hay un “héroe” que busca hacer lo correcto, no hay una mujer fatal capaz de volver loco a cualquiera, no hay una historia poderosa y llena de simbolismos, no, en La Gran Masacre, solo hay lo que su titulo promete (en ese sentido es una obra sincera con sus lectores), violencia a tutiplén, en una historia que se podía haber contado en la mitad de páginas y aun así sobraría alguna, y es que el comic parece convertirse para Miller en un mero divertimento, una historia para pasar el rato, muy lejos de la inmensa calidad que se le supone al autor americano.

Desde el punto de vista gráfico, la historia sin llegar al nivel de El largo adiós, si se muestra como potente, Miller es un maestro en el campo de la narrativa gráfica, y pese a que la obra parece por momentos descuida y tal vez demasiado feista, resulta gráficamente muy atractiva, con un Miller que vuelve a demostrar como contar mucho con muy poco, la cuestión tal es ¿esto es suficiente?, siendo Miller es evidente que no debe ser así, hablamos de autor que por aquellos años caso cada obra que tocaba resultaba como mínimo un gran comic, tanto grafica como literariamente, y lo cierto es que La Gran Masacre no estaba a la altura de su autor, el problema parecía venir por que la idea, original, valiente y rompedora en El largo adiós, parecía empezar a dar síntomas de cansancio, de estar agotada, de no dar más de si, y eso que solo iban tres miniseries, y es que cada obra había supuesto un bajon con respecto a la anterior, y si bien La Gran Masacre no era un mal comic, desde luego no era bueno, como mucho mediocre, algo que debería ser imposible en un autor como Miller, así y cuando toda esperanza parecía perdida, llego Ese Cobarde Bastardo, y Miller demostró por que era un genio, pero eso queda para otro día.

miércoles, 18 de julio de 2007

Marvel Zombies.

De nuevo retomo una reseña que publique en su momento en Comixaría, en este caso versa sobre la obra de Kirkman y Philips, Marvel Zombies, cuya publicación tanto expectación había causado.

Todo empezó en Ultimate Fantastic Four 21 (noviembre de 2005, publicado en España por Panini en Ultimate Fantastic Four 11) el entonces guionista de al colección el maestro de los fuegos de artificio Mark Millar ayudado por el foto realista Greg Land en el dibujo, planto una saga de tres parte llamada Crossover.

La saga partía de la idea del encuentro entre el Reed Richards del Universo Ultimate y un Reed Richards de otra realidad, Millar jugo en un principio al despiste y durante algún tiempo se especulo con la posibilidad de que, el para muchos esperado encuentro entre los héroes del Universo Marvel tradicional y los del Ultimate se produciría por fin en la páginas de Ultimate Fantastic Four, la realidad demostró ser bastante distinta y lo que Millar planteo fue el intento de invasión de la realidad del Universo Ultimate por otra realidad alternativa en la que una extraña plaga había convertido a todos lo héroes de la tierra en zombies con un hambre insaciable y que sin embargo conservaban todos sus poderes e intelecto, solo Magneto y unos pocos humanos quedaban libre de la plaga, la saga entretenida y bien llevada culminó con la destrucción del portal interdimensional dejando a los zombies encerrados en su dimensión a costa de un Magneto que se sacrificaba quedando el mismo encerrado en la dimensión zombie y rodeado de hambrientos (ex)superhéroes.

Precisamente ese es el punto en el que se inicia, Marvel Zombies, saga publicada recientemente por Panini en un tomo 100% Marvel que contiene los cinco números originales de la miniserie americana, con guiones de Robert Kirkman y dibujos de Sean Philips (además de contar con excelentes y macabras portadas homenajes a portadas clásicas de la editorial a cargo de Arthur Suydam), y en principio se trataba de uno de los comics más esperados del año, el guionista era uno de los mejores escribas de la última hornada de autores americanos, su trabajo en la excepcional Los Muertos Vivientes, unida a su labor en el mudo de los superhéroes con obras de la calidad de Invencible, hacían de él, el candidato ideal para escribir una serie que debía mezclar ambos conceptos, por otra parte el dibujante Sean Philips, se trata de uno de los mejores narradores del mercado y su trabajo en la excelente Sleeper es solo una muestra de su enorme calidad, con estos mimbres parecía que el éxito estaba seguro y las ventas y criticas que llegaban de EEUU así parecían confírmalo.

Sin embargo llegada la hora de la lectura de la obra uno no puede más que sentirse defraudado ante lo que allí se narra, una idea que tenía potencial para ir más allá de ver a personajes Marvel comportándose como depravados y comiendo todo lo que pillaban, se transforma a lo largo de toda la miniserie en precisamente eso, una historia de héroes Marvel comiendo sin parar, devorando todo lo que pillan. La historia tiene sus puntos y sus guiños, pero es ante todo un morboso y sangriento espectáculo maravillosamente dibujado por un Philips que si esta a la altura de la expectativas, pero que se queda muy, muy lejos de lo que un autor como Kirkman ha demostrado que sabe y puede hacer, no se tal vez esperar algo de reflexión acerca de cómo unos héroes que estaban dispuestos a sacrificar su vida para salvar a la gente son transformados en brutales caníbales sea demasiado pedir para una miniserie de tan solo cinco números, pero lo cierto es que algo más de lo que ofrece Marvel Zombies no creo que sea una exigencia excesiva habida cuenta la calidad del guionista implicado, y es que el problema de al miniserie es de enfoque, si se pretendía enfocar el tema desde un punto de vista serio y terrorífico, la obra es totalmente fallida ya que ni produce miedo, ni da angustia, si se pretendía un tono más gore-divertido, la obras es fallida, no solo no hace gracia si no que tras leerla te quedas igual que estabas, por ello la obra solo puede calificarse como de decepción mayúscula, que sirve prácticamente solo para el divertimento de un guionista que realiza uno de los perores trabajos de la su hasta ahora casi inmaculada carrera

martes, 17 de julio de 2007

Daredevil: Historia de un hombre sin miedo. Parte XLII: Daredevil Redención.

Finalizando momentáneamente el apartado de las miniseries (en espera de que concluya la de Punisher y de que en España se publique la del padre de Matt o la de DD el Fin, teniendo esta última que salir todavía en los USA), le toca el turno al que sin duda es la más interesante de todas, Daredevil: Redención.

Publicada originariamente en forma de miniserie entre Marzo y Agosto de 2005, en España la pudimos disfrutar en un tomo 100% Marvel de la mano de Panini, perteneciente de nuevo al sello Marvel Knights, la serie contó con los guiones del entonces semidesconocido David Hine (Distrito X, Silent War) y con el dibujo de Michael (Alias) Gaydos, destaando también las impresionantes portadas de Bill Sienkiewicz

El guionista que apenas acaba de empezar en el comic comercial USA demostró muy rápido su buen hacer siendo esta mini un claro ejemplo de ello, en su trabajo muy ligado a la franquicia mutante destacan obras como Distrito X, su continuación Mutopia X, así como sus consecuencias en Decimatión con los 198 o en Civil War con Civil War: X-Men, siendo también relevante su trabajo (englobado también en el evento Decimatión) en El Hijo de M y su secuela, Silent War todavía inédita en nuestro país, fuera de Marvel y más allá de sus primeros trabajo en el Reino Unido destaca su labor en Spawn, serie que busca relanzar, (sin demasiado éxito comercial de momento) tras varios años ya, lejos de los focos.

Por su parte Michael Gaydos es sobre todo conocido por su excelente labor en Alias, serie donde junto B. M. Bendis creo uno de los personajes más carismáticos de la Marvel de los últimos tiempos, Jessica Jones, gran narrador y excelente reflejando expresiones y sentimientos, su estilo claro-oscuro y algo fiesta, le mantiene lejos de las luces del estrellato, pese a ser un magnifico dibujante.

La llegada de Hine al comic comercial americano si no impactante si resulto sorprendente, la calidad, madurez e inteligencia de sus comics, llamaron inmediatamente la atención, en un medio muy dado a guionistas que más allá de frases “molonas” y fuegos de artificio poco tiene que ofrecer, Hine sin embargo ofrecía otras cosas, en Distrito X, consiguió escribir una de las mejores serie policíacas de la historia de Marvel, un comic en la línea (aunque ligeramente inferior) de la excepcional Gotham Central en el que sin embargo se acusaba a Hine, de que si bien el comic era muy bueno, el que estuviera o no Bishop como protagonista era secundario, es más muchos decían que casi sobraba, y es que la historia e ideas que Hine allí planteaba podían funcionar igual de bien con o sin el hombre X.

Algo parecido se dice de la obra que nos ocupa y es que Daredevil: Redención narra como en un perdido pueblo de la América profunda, el asesinato de tres niños es endilgado casi sin pruebas a unos jóvenes “diferentes” , jóvenes con ideas y formas muy lejos de la América más ultraconservadora que representa RedemptionValley, jóvenes a los que les gusta el heavy, que tiene largas melenas y que no encajan con los parámetros de una sociedad que a las primeras de cambio les acusa de satanismo, iniciando un juicio paralelo en el que los jóvenes nada tienen que hacer.

La historia (inspirada en un hecho real), presenta a Matt llegando a RedemptionValley, con la intención de salvar la vida de los acusados, misión que se convierte casi en imposible frente a un jurado lleno de prejuicios que pese a la total ausencia de pruebas ya tiene la sentencia decidida.

Hine aprovecha la historia para mostrarnos una América muy distinta al que habitualmente podemos ver, una América llena de prejuicios, incapaz de aceptar lo diferente, una América claustrofóbica (sensación que se ve incrementada por el trabajo de Gaydos, que vuelva a lucirse en esta obra), endogámica, temerosa de la mano de un Dios símbolo en este caso de miedo y represión, el retrato de Hine es escalofriante, duro, sin concesiones, un retrato en el que Matt se torna en mero acompañante y en el que Daredevil parece sobrar por completo...pero cuando más parece que esto es así, Hine vuelve a sorprendernos y al final la presencia de DD se ve justificada, y es que Hine juega con gran habilidad la dicotomía de justiciero/abogado, cuando años después y tras fallar todas las apelaciones, Joel (uno de los acusados) suplica a Matt que se convierta en DD y lo saque de allí (la acción se sitúa en plena época Bendis, con la identidad de DD en entredicho) y este aunque llega a fantasear con la posibilidad de hacerlo (algo que Bendis emularía en su última saga al frente del cuernecitos) finalmente opta por no hacerlo ya que pese a recibir una clara de lección de que no debería (o al menos no siempre) hacerlo, cree (y respeta) en el sistema judicial.

Al final la historia ofrece una tardía, pero convincente retribución, y de nuevo Daredevil (como ya le ocurriera durante la historia, donde Matt y solo Matt es quien puede hacer algo) recibe una importante lección, la violencia, no siempre es la respuesta, enlazando así en cierta manera con elementos del discurso de la etapa de Nocenti en la serie. (o yendo más allá con Miller y su “Ruleta”).

En definitiva un comic sobresaliente en todos los aspectos, y es que incluso su punto más débil (su personaje protagonista parece sobrar durante gran parte de la historia) resulta subsanado con un brillante final, donde la presencia de DD se torna como vital para redondear el comic.

jueves, 12 de julio de 2007

Supreme Power, un balance personal.

Tomando ejemplo de Lord, y su semana del Escuadrón Supremo hoy voy a adaptar un poco un post que es su día escribí sobre Supreme Power para comixaría y lo voy a poner también por aquí.

El Escuadrón Supremo nació a principios de los 70 en las páginas de los Vengadores de la mano de los ya mítico Roy Thomas y John Buscema, el primeo ilusionado con la posibilidad de realizar un cruce entre la JLA y los Vengadores (lejos quedaban todavía los crossovers entre editoriales) decidió crear la versión Marvel del poderoso grupo de la Distinguida Competencia, así primero como el Escuadrón Siniestro y más tarde ya como el Escuadrón Supremo los personajes pulularían por la páginas de los Vengadores durante muchos años en historias de calidad variable (aunque generalmente alta), entre sus miembros encontraríamos a personajes tales como Hyperion (trasunto de Superman), Doctor Spectrum (Green Lantern), Princesa Poder (Wonder Woman) o Nighthawk (Batman).

La importancia de estos personajes aumentaría exponencialmente cuando a medados de los 80 Mark Gruenwald escribiera una miniserie de 12 números sobre los personajes en la que estos se hacían con el control de la Tierra contando prácticamente solo con la oposición de Nightawk, la historia de altísima calidad puede ser considerada por derecho propio como un clásico absoluto de la historia de Marvel y su influencia en importancia en el género sería mucho mayor de no haber prácticamente coincido en el tiempo con obras cumbre como Watchmen (con la que comparte algún planteamiento temático) o Dark Knight.

Tras esto los personajes seguirían apareciendo en distintos proyectos y serie regulares hasta que en el año 2003 el prestigioso guionista J. Michael Straczynski lanzó la idea de recuperar la esencia de los personajes con un nuevo proyecto en el cual se realzaría una especie de versión Ultimate del Escuadrón Supremo clásico (una versión de una versión, lo cual no deja de ser curioso), el proyecto que se llamaría Supreme Power, contaría con los lápices del excelente Gary Frank y se enmarcaría en la línea Max (la línea adulta de Marvel) con el objetivo de eliminar cualquier tipo de restricción creativa.

La historia parte de la llegada de Hyperión a la Tierra (un calco de la Superman, hasta que se produce un matiz clave que lo diferencia todo) y a partir de ahí se centra en la existencia de varios seres con superpoderes influidos por la llegada del mismo narrando así la antesalade la creación del poderoso supergrupo, el comic juega una vez más con la pregunta ya clásica de ¿cómo seria el mundo si los superhéroes existieran de verdad?, idea múltiples veces tratada en el género y que más allá del trabajo de Gruenwald ha dado lugar a obras maestras de la talla de Watchmen o Miracleman (ambas de Alan Moore); y es precisamente la existencia de estas obras lo que en gran medida perjudica a Supreme Power, ya que al tener tal planteamiento la comparación se hace inevitable y son pocos los comics que resisten la misma con semejantes trabajos, JMS tal vez consciente de ello, asume e incluso homenajea (o imita depende como se mire) a Miracleman a lo largo de su obra.

Más allá de esto y analizada individualmente, Supreme Powerse trata de un magnifico comic excepcionalmente dibujado, JMS nos presenta un mundo duro y cruel, peligrosamente parecido al nuestro, donde el cinismo y la mentira están al orden del día, un mundo en el que Hyperion se ve incapaz de marcar una diferencia, y en el que al final solo quiere que le dejen en paz, un mundo capaz de encumbrar y vilipendiar aun héroe con la misma facilidad que uno se cambia de camisa.

Bajo este prisma Supreme Power comparte similitudes temáticas con Authority y Ultimates, pero carece de la violencia gratuita y la simpleza de la primera y del mero fuego de artificio que supone la segunda, mostrándose a si muy superior a ambas, mucho más inteligente y madura, en Supreme Power la violencia es significativa y cruel, el mundo no se puede cambiar simplemente derribando gobierno que no gusten y los personajes son algo más que clichés con patas diciendo frases “molonas”, los 18 números que dura Supreme Power, sin ser (ni estar cerca de ser) una obra maestra, si se muestran como una obra inteligente en la que el autor sabe lo que quiere contar y como quiere contarlo, asumiendo sus limitaciones y conociendo sus virtudes contando además para ello con un excelente dibujante casi perfecto para esta obra.

Sin embargo todas estas virtudes, se ven algo deslavazadas por su propio éxito, la colección que se convirtió en la más vendida con diferencia del sello Max, genero hasta tres spin-off de calidad harto variable, el primero centrado en al figura del Doctor Spectrum escrito por la protegida de JMS, Sara “Sam” Barnes y dibujada por un mediocre Travel Foreman, supuso un autentico fracaso creativo, ya que el intento de penetrar en la mente y motivaciones del personaje solo consigue provocar tedio y una sensación de pretenciosidad vacua, no mucho mejor es el segundo spin-off en este caso centrado en la figura de Nighthawk, realizado por el clon malo de Ennis, Daniel Way y dibujada por Steve Dillon la miniserie consiste en comic lleno de violencia gratuita que trata de marcar las diferencias entre este personaje y Batman, pobre, pobre y ni siquiera el trabajo de Dillon consigue sobresalir de la mediocridad de un guión malo y lleno de tópicos, más relevancia tiene el tercer spi-off, centrado en la figura de Hyperyon realizado por el propio JMS en el guión con Dan Jurgens al dibujo, el comic supone la transición perfecta desde Supreme Power hasta Supreme Squadron ya que en el se sientan las bases del futuro supergrupo, se trata de una miniserie de calidad muy superior a las otras dos pero que desgraciadamente se encuentra muy lejos de Supreme Power en cuanto a calidad, JMS cierra varias tramas de manera poco original y convincente y sienta las bases del futuro grupo cuyo primer tomo se acaba de publicar en España y que sigue claramente las tendencias marcadas en Hyperion, un comic entretenido sin más, pero lejos muy lejos de los planteamientos y la calidad de Supreme Power.

miércoles, 11 de julio de 2007

Sin City: Mataría por ella.

Tras el (relativamente sorprendente) éxito del primer Sin City, Frank Miller continuo con su obra más personal en Sin City: Mataría por ella donde una vez llevó al extremo los tópicos del genero negro y profundizo en su particular universo.

Publicada en forma de miniserie de 6 números entre 1993-94, Sin City: Mataría por ella (traducida en un principio como Moriría por ella, como se observa en la portada que acompaña el post), se trata de la segunda incursión del autor americano en su particular Ciudad del Pecado, situada cronológicamente antes que Sin City: El duro adiós (aunque en le transcurso de la trama ambas historias ocurren de forma paralela), supone una profundización en la ciudad y su gentes.

De nuevo al igual que ocurría en la primera historia, Miller recurre a un protagonista masculino, cuya capacidad de supervivencia y resistencia a las balas roza lo sobrehumano, en una exageración buscada para mostrar la fuerza del personaje, fuerza y resistencia sobrehumana, propia de todos los protagonistas millerianos, que en casi todos los casos se ven acompañadas por una fuerza equivalente en lo que a principios morales (sean cuales sean estos) se refiere, tal es el caso de Dwitght protagonista de la obra, con un lado violento y difícil de controlar, se gana la vida sacando fotos en casos de adulterios tras un pasado fallido como periodista, el personaje que presenta muchos de los tópicos millerianos (duro, con un pasado tenebroso, de vuelta de todo o casi de todo, se gana la vida con actividades moralmente cuestionables, etc) presenta sin embargo muchas diferencias con respecto a Marv, y es que Dwitght aparece como mucho más frió y calculador, mucho más inteligente, lo que no impide sin embargo que sea manipulado por la otra gran protagonista de la historia Ava (la “ella” a la que se refiere el titulo), prototipo de mujer fatal clásica del género negro, no duda en manipular a Dwitght, (con quien ya había tenido una tortuosa relación en el pasado) para matar a su marido y heredar su riqueza, tratando después de matar al propio Dwitght,.

La historia es en si en un clásico absoluto del género negro, la mujer fatal, bella e inalcanzable, que manipula al protagonista tratando este posteriormente de conseguir su venganza, desde este punto de vista Ava, representa todo eso y más mostrando de paso una clara diferencia con Goldie (mujer cuyo asesinato desencadena el primer Sin City), pero a la vez una cercanía al ser de nuevo una mujer la responsable en una u otra mediada de que todo se ponga en marcha, un clásico también del género negro, que Miller (como en casi todo lo que hace) lleva aquí al extremo.

La historia sirve de paso para profundizar en las chicas del Barrio Viejo, un bario de prostitutas apenas esbozado en El largo adiós que cuenta con sus propias reglas y donde la policía no se atreve a entrar allí Dwitght, tiene varios contactos y por ello en Mataría por ella, podemos conocer algo más de Gail (apenas vista en El largo adiós), la cual será una de las lideres de la chicas y estará enamorada de Dwitght, o asistiremos a la presentación de Miho (“la pequeña y letal Miho”) una prostituta de origen oriental que se convertirá en uno de los personajes más conocidos de la serie, las chicas junto con Dwitght, serán protagonistas casi absolutas de futuras obras de Miller, como La Gran Masacre o Valores Familiares.

Teniendo en cuenta todos los elementos que componen Mataría por ella, lo cierto es que la historia se presenta como una ampliación y afianzamiento de Sin City, una obra argumentalmente más compleja que la primera (tampoco mucho, y tampoco es que sea una virtud, ya que gran parte del encanto de El largo adiós reside en sus simplicidad), donde la historia al no tener ya la capacidad de sorpresa de la anterior y ser por ello más esperada, resulta, si bien no fallida si de menor entidad, ya que la utilización excesiva de los tópicos del género negros sin posibilidad de salirse de sus esquemas y el menor carisma de la “causa” (en forma y fondo) de su protagonista, hacen que su lectura sea menos impactante, como siempre la obra es como un puñetazo directo al estomago, pero en este caso duele menos.

Gráficamente el comic vuelve a ser una lección del maestro Miller de cómo con poco contar mucho, de cómo mostrar belleza y sensualidad solo con un brillante juego de luces y sombras, una nueva lección de narratividad y de concepción de la página que sin embargo y también en este aspecto parece haber bajado un escalón con respecto a la primer historia , y es que el dibujo resulta más “garabateado”, menos sólido y más feista.

En definitiva Mataría por ella, es un gran comic, tal vez excesivamente alargado para lo que se quería contar y que esta lejos de la calidad (en todos los aspectos) de El largo adiós, pero que aun así supone un obra muy por encima de la media, la parte más negativa estriba en que inicia un descenso en la calidad de Sin City que lamentablemente se confirmaría en La gran Masacre, siguiente obra de la Ciudad del Pecado.

martes, 10 de julio de 2007

¿Esta todo inventado?

Leía el otro día la critica de Lord_Pengallan sobre Héroes donde entre otras defectos le achacaba su falta de originalidad, cierto es, pensaba yo, Héroes se limita a trasladar a la pequeña pantalla cosas que los seguidores del comic de superhéroes hemos leído ya “cienes” de veces, pero, ¿es esto exclusivo de Héroes?, ¿hace cuanto tiempo que un comic de superhéroes no consigue sorprenderte realmente?.

Cuando era niño cada comic era una sorpresa (bueno no todos pero si la mayoría), cada aventura me entusiasmaba, me gustaban las reacciones de los personajes y me dejaban pasmado las revelaciones sorpresa, con el paso del tiempo cuando uno crece recuperar sea sensación es obviamente imposible, pero aún recuerdo comics de las dos grandes que en su momento consiguieron impactarme, sorprenderme cuando ya tenía cierta edad, sin embargo prácticamente desde el Thunderbolts 1 no he leído un comic de Marvel o DC que consiguiera dejarme con la sensación de “¿¿¿¿cómo????”, (tal vez la retirada de Gordon en Agente Herido, pero a mucho menor nivel) evidentemente en todo este tiempo ha habido buenos (y malos) comics, y yo los he podido disfrutar, pero ninguno ha conseguido que me sintiera realmente sorprendido.

Todo esto me lleva a pensar, ¿esta todo inventado?, ¿el género se limita tan solo a fagocitarse a si mismo sin capacidad real para sorprender?, ¿es culpa mía por haber leído tantos comics, que a estas alturas de la película ya nada de nada va a pillarme con la guardia baja?., no lo se, pero lo cierto es que, aunque en lo que a las grandes editoriales se refiere el género es cíclico, y cada cierto tiempo repite esquemas, no es menos cierto que este siempre ha contado con autores con una gran capacidad de inventiva que en algún momento u otro han conseguido sorprender a sus lectores, generalmente para volver antes o después al status quo primigenio pero mientras tanto y no la sorpresa allí ha quedado, hoy en día esto no pasa, o al menos a mi no me pasa, pienso que en ello tiene mucho que ver la actual estructuración de la aventuras en arcos arguméntales casi cerrados que impiden que realmente se tracen planes a largo plazo en torno a una revelación impactante y coherente, ya que, de nada vale que un guionista de turno (o el equipo editorial de turno) se saque un truco sorpresivo de la manga si es una chorrada totalmente incoherente con la trayectoria del personaje afectado, como es el caso de lo acontecido con Spiderman en Civil War 2, por poner un ejemplo.

Sin embargo cuando toda esperanza parece perdida, cuando ya nada parece que se pueda esperar a este respecto llega Robert Kirkman y en su serie Invencible, consigue (tras muchos años, tras tener “el culo pelao” y usando para ello solo las herramientas más clásicas del género) sorprenderme y hacerme ver que todavía es posible, que solo hace falta querer y conocer el género, saber cuales son los mecanismos básicos que lo hacer rodar y cuando menos lo espere el lector ZAS!, darles la vuelta, esto que desgraciadamente no se ve en DC (metida en un permanente “revival” retrocontinuista) y Marvel (preocupada más por llamar la atención que por hacer buenas historias, y poniendo los grandes crossovers e ideas por encima de los propios personajes y sus esencias), se ve cada vez con mayor frecuencia en las llamadas independientes, que parecen más preocupadas por hacer buenos comics, por encima de arreglar continuidades mil veces rotas o montar un circo mediático a costa de maltratar a sus personajes, y es que va tener razón el Tebeonauta cuando decía que los comics de mejor calidad del género no se están haciendo ahora ni en Marvel ni en DC, Invencible o ExMachina (a otro nivel) son clara muestra de ello.

jueves, 5 de julio de 2007

Daredevil: Historia de un hombre sin miedo. Parte XLI: Daredevil/Spiderman.

Siguiendo con las reseñas de las miniseries de Daredevil, de nuevo el sello Marvel Knights nos trae una miniserie del cuernecitos en este caso compartiendo protagonismo con el otro gran héroe urbano de Marvel: Spiderman.

La miniserie de cuatro números titulada Marvel Knights: Daredevil/Spiderman fue publicada en los USA con fecha de portada enero-abril de 2001, no mucho más hubo que esperar en España y es que en Agosto del 2001 su primer número fue incluido en el número 18 del Daredevil volumen V con el objetivo de ampliar las distancias con los USA en lo que a la serie regular se refiere ya que los continuos retrasos de la colección en su país de origen había obligado incluso a parar la colección en España.

La labor creativa del comic fue realizada por Paul Jenkins (Cvil War: Front Line) a los guiones, Phil Winsdale (Marvel Knights: Daredevil) a los lápices y el ya mítico Tom Palmer (Uncanny X-Men) a las tintas, el guionista estaba por entonces en camino de convertirse en un guionista “hot” (algo que finalmente no lograría), y es que el éxito de MK: Inhumanos y el proyecto de Lobezno: Origen habían convertido al guionista británico en un autor de moda status que sobre todo debido a su mediocre trabajo en Spiderman no consolidaría, sea como sea lo cierto es que se trata de un competente guionista que pese a contar con varias mediocridades en su haber rara vez ha firmado un guión que pueda considerarse como malo y cuenta en su currículo además de con las obras ya mencionadas etapas bastante interesantes en series como Hellblazer o Hulk, en lo que al dibujante se refiere este trabajo no sería su último contacto con el personaje ya que sus lápices se pondrían al servicio de Bob Gale en su saga para la serie regular del mismo, su estilo fluido y de buen narrador con un ligero toque realista, sin ser nada del otro mundo se muestra efectivo y fácilmente legible, destacar también las portadas a cargo de Alex Ross (Marvels) el cual no realizaría precisamente su mejor trabajo.

Entrando ya en el análisis de la miniserie, lo cierto es que Spiderman y Daredevil tienen muchas cosas en común, ambos son vigilantes de corte urbano, ambos son casi símbolos de New York y ambos tiene una base originaria muy semejante (no hay que olvidar que DD al principio era poco más que Spiderman de segunda), sin embargo son también muchas las diferencias que les separan, dicotomías que sin llegar a los niveles de los mucho más icónicos Batman y Superman, si se les asemejan, donde uno es oscuro, duro y con una vena más detectivesca, otro es optimista, luminoso y más puramente superheroico, donde uno es lacónico y en ocasiones terrorífico otro es gracioso y parlanchín, son estas (entre otros elementos, como por ejemplo que ambos personajes sean amigos y conozcan sus respectivas identidades secretas) las dicotomías que hacen que una historia con ambos personajes pueda ser muy interesante como por ejemplo la ya mítica Saga del Comepecados (Spectacular Spider-man 107-110) donde Peter David realiza un excelente trabajo de caracterización de ambos personajes.

Desgraciadamente este no es el caso de MK: Daredevil/Spiderman obra que puede ser incluida sin genero de duda entre los trabajos más mediocre de Jenkins, la historia se centra en los ataques continuos que los intereses de Kinping están sufriendo a lo largo de la ciudad, ataques que atraen a atención de DD y Spidey preocupados ante la posibilidad del estallido de una sangrienta guerra de bandas, la trama termina girando hacía otra parte completamente alejada de la que partía, y supone el retorno de un cadavérico (nunca mejor dicho) Vibora que pretende vengarse de DD al que acusa de su muerte y de paso satisfacer al demonio (¿¿¿???) entregándole almas puras.

La historia que es un sinsentido de principio a fin se ve complementada con la aparición de la Viuda Negra que ayuda a Foggy a encontrar pruebas para librarse de Fisk como cliente el cual (como en época de Miller) trata de utilizar a Matt/DD como abogado y defensor de sus intereses (bajo la premisa de que si sus intereses son atacados el conflicto puede resultar sangriento lo cual no deja de ser cierto, pero lo que carece de sentido es que utilice ese argumento para tener a Matt como abogado cuando realmente lo que quiere es que DD detenga a los “malos”, podría tener sentido si quisiera tocar las narices a Matt, pero entonces lo que es totalmente ilógico es que este se preste a ello), a lo largo de la miniserie harán acto de presencia el Zancudo, Gladiador II y el Búho los cuales serán solo herramientas que Víbora usa para atraer a DD (lo cual tampoco tiene mucho sentido, ya que un ser de ultratumba como el, esta bastante claro que podría acercarse a DD sin montar tanto rollo), la resolución final de la trama aparte de algo confusa (todavía hasta donde yo se nadie ha aclarado que paso exactamente con el Búho, ya que al final se redime con un sacrificio que parece definitivo, pero lo cierto es que no mucho después estaba por hay danzando como si tal cosa, no se si cuenta algo en algún comic que no he leído, pero desde luego parece raro) deja un sabor amargo de oportunidad desperdiciada ya que aparte de unos pocos diálogos (en lo que Matt recrimina a Peter que se tome todo a guasa mientras que Peter estalla ante su permanente laconismo) la interactuación entre DD y Spidey es casi nula.

miércoles, 4 de julio de 2007

¡Lujo y desenfreno!, que para algo nos sobra el dinero.

Últimamente las ediciones de lujo de comics de superhéroes están copando las librerías especializadas, que si el Spiderman de McFarlane, que si el Absolute Crisis…pero ¿es necesario tanto lujo?.

El comic se superhéroes fue concebido desde un origen como un género popular que intentaba llegar a todo el mundo y en especial al público más joven al que por regla general se le suponía un menor poder adquisitivo, por ello el precio de los comics del género siempre ha sido asumible para el tipo de público al que iba dirigido, en España. Pda como principal importadora de este tipo de comics había aplicado esta regla casi al pie de la letra, los comics debían ser populares y para ello su precio debía ser económico, por ello las llamadas ediciones de lujo si no ausentes si se veían reducidas a momentos y comics muy puntuales, la llegada de Panini no supuso en principio un cambio al respecto y la situación (más allá de la política puramente de lujo de Norma), parecía que iba a seguir igual.

Sin embargo la cosa cambio rápidamente, Panini consciente de que gran parte de su público era gente con poder adquisitivo suficiente, aficionada a los superhéroes desde hace años, entendió que el mercado tal vez tuviera sitio para comics de lujo a precio de lujo y así tras varias pruebas se lanzo al mercado los llamados Best of Marvel Essentials (BoME), comics de precio desenfrenado que sin embargo parecen haber encontrado su hueco en el mercado.

Pda por su parte y tras el éxito de la edición Absolute de V de Vendetta, se dedico a inundar el mercado de comics Absolutes, casi cualquier obra clásica (o no tanto) con expectativas de venta elevadas ha tenido o tendrá un edición Absolute, algo que parece lógico en obras publicadas múltiples veces (Watchmen, Kingdome Come, DK…) para así poder atraer a la gente que ya tenga otras ediciones, pero que se antoja extraño para comics publicados hace mucho tiempo o incluso no publicados al completos (las obras de Neal Adams entre otras).

Tanto los Absolutes como los BoME, más allá de las diferencias de precios (mucho más “baratos” los primeros) o de edición (tamaño gigante y más extras los primeros que a todas luces aparecen como ediciones muy superiores) parecen tener en común el hecho de reconocer que unos comics concebidos básicamente para ser populares pueden convertirse en productos de lujo y además tener éxito, hay un publico ahí fuera que demanda (y compra) este tipo de ediciones, cuyo éxito parece venir a dar la razón a la política editorial de Norma cuando poseía los derechos de DC: los comics de superhéroes pueden venderse también en formato lujo y hacerlo con éxito.

¿Pero es esto bueno?, ¿es decir es adecuado “traicionar” el espíritu de unos comics de clara vocación popular?, la respuesta se antoja compleja y en muchas ocasiones requiere un análisis caso a caso (no es lo mismo lanzar una edición de lujo de los X-Men de Morrison publicados recientemente en formato grapa y fáciles de adquirir en condiciones económicas, que hacerlo con el Excalibur de Claremnot-Davis publicados hace más de 20 en grapa e inencontrables hoy en día), pero en general pienso que no, que no es bueno, la existencia de una línea de lujo para contentar a determinada clientela que la demanda esta bien siempre y cuando no se convierta (como ha sido el caso) en algo regular, es decir casi cualquier comic interesante del fondo editorial de DC parece que va a ser publicado en Absolute (Camelot 3000, Arkham Asylum, Broma Asesina…), mientras que casi cualquier comic interesante del fondo editorial Marvel parece que va a ser publicado en BoME (y en este caso incluso series regulares, lo cual es peor), lo que no deja de ser algo injusto para los que pensamos que el comic ha de seguir siendo popular, y ante todo injusto para la capacidad de elección del cliente que ha de optar entre el lujo o la nada, marcando así una clara diferencia con el mundo del libro o el de los DVD donde siempre puedes comprar un edición de bolsillo o una versión no extendida y donde en todo caso siempre puedes elegir.

martes, 3 de julio de 2007

Sin City, el largo adiós.

Poco se podía imaginar, Frank Miller que más de quince años después de la publicación del primer Sin City, su trabajo más personal se convertiría en un éxito de critica y público y que tras una exitosa adaptación cinematográfica le abriría de par en par las puertas de la industria cinematográfica no ya como guionista si no como director.

Cuando a la altura de 1991 Frank Miller decidió publicar Sin City asumió un riesgo muy grande, realizar una historia de genero negro (que hacía tiempo parecía haber desaparecido del mundo del comic americano) y además hacerlo en blanco y negro (en una época en la que el color estaba asumiendo cada vez más protagonismo) suponía una aventura que se antojaba de éxito dudoso, a su favor Miller contaba su enorme prestigio conseguido gracias a (entre otras) varias obras maestras realizadas con personajes como Batman o Daredevil, prestigio que sin embargo ponía en juego ya que no se debe obviar el carácter devorador de mitos del mundo del comic-book americano donde en demasiadas ocasiones solo eres tan bueno como la última historia que has realizado, si Frank Miller se jugo mucho....y salió triunfante.

Sin City (más tarde rebautizada como Sin City: El largo adiós) se publico serializada a lo largo de nueve entregas en la revista Dark Horse Presents entre abril del 1991 y junio de 1992 y casi de inmediato supuso un éxito de critica y publico, varios son los factores que explican tal circunstancia, tal ves el más relevante se encuentre en la propia obra de Miller, y es que si uno analiza su evolución y desarrollo todo parece conducir a Sin City, al fin y al cabo su trabajo en Daredevil es ante todo una larga historia de genero negro, con sus mujeres fatales, sus poderosos mafiosos, y un protagonista cada vez más hundido en una espiral de oscuridad de la que finalmente lograra salir, por su parte Batman Año Uno por ejemplo supone el inicio de una perfecta serie de genero negro con muchos de los ingredientes ya descritos, en ambas obras además la ciudad (New Yok o más bien la Cocina del Infierno en DD Gotham en Batman) cobra una fuerza fundamental y se convierten en un protagonista más, son ciudades opresivas, oscuras, corruptas en las que se hace difícil vivir, ciudades que ahogan y corrompen a sus habitantes, estilísticamente Sin City se anticipa en el trabajo de Miller en Electra Lives Again, donde en muchas ocasiones Matt recuerda al futuro Marv.

Sin City es también fruto de una experimentación artística, Miller que siempre había sido un excepcional narrador jugando con la página como un autentico maestro, en esta obra demostrara el potencial casi infinito del blanco y negro y convierte cada página de Sin City en una lección de cómo con poco contar mucho, el manejo de las luces y las sombras la expresividad de los rostros la belleza y la sensualidad de sus mujeres se trasmite con apenas unos trazos que hace que al mera contemplación justifiquen la existencia de esta obra.

Desde el punto de vista literario Sin City, reúne y da forma a todas las obsesiones de Miller como escritor , se ha dicho en muchas ocasiones que Miller solo sabe escribir sobre superhéroes y auque desde cierto punto de vista esto pueda ser admitido como cierto tal vez sea más correcto decir que Miller solo sabe escribir sobre superhombres, seres plagados de defectos y muy lejos del perfil de lo que cabría entenderse como héroes pero que sin embargo tienen una serie de características físicas y mentales que les sitúan por encima de los seres humanos corrientes, los protagonista de Miller son siempre hombre de honor que pese a tener en muchas ocasiones una moralidad más que cuestionable, hacen lo que creen tener que hacer sin importarles las consecuencias, tal es el caso de Marv protagonista de este primer Sin City, el cual removerá cielo y tierra tas el asesinato de Goldie la única mujer que la hecho sentirse amado en su vida, poco importa que fuera una prostituta con al que solo estuvo una noche y que acudió a ál solo por protección, ha sido asesinada y será vengada aunque para ello tenga que pasar por encima del cardenal Roark amo y señor de Sin City, aquí observamos de nuevo otra de las grandes obsesiones de Miller, un hombre contra el poder absoluto, sin esperanza de éxito real, pero sin posibilidad de rendirse el individuo se enfrenta a un poder casi omnímodo y corrupto hasta la medula, un individualismo exacerbado presente en casi todas la obras del autor americano, el resultado final con la culminación de la venganza no será ni mucho menos un triunfo para el “héroe”, el cual será vilipendiado públicamente y ejecutado en una silla eléctrica, pero eso no importara, la corrupción del poder no puede ser vencida pero si tocada y humillada.

Pero por encima de cualquier otra consideración el autentico protagonista de Sin City, es Sin City la ciudad, con sus callejones oscuros sus bares de mala muerte, sus bellísimas prostitutas, sus policías corruptos y sus matones a sueldo, Basin City (nombre real de al ciudad aunque todo el mundo la llama Sin City) es una suerte de Gothan elevada a la enésima potencia, solo que sin un vigilante oscuro que trate de mantenerla limpia, no en Sin City no hay héroes, solo personas que tratan de sobrevivir y en ocasiones hacer lo correcto.

El trabajo de Miller en El largo adiós, sin ser redondo y sin llegar a los niveles que alcanzaría en Ese cobarde bastardo, como todo trabajo de Miller supone un puñetazo directo al estomago, una lectura que atrapa de principio a fin y que apelando al corazón más que al cerebro consigue quedar grabado en la mente de quien lo lee por mucho tiempo que pase tras su lectura, Miller demuestra en este trabajo por que es un grande entre los grandes siendo lo más curioso que Sin City El largo adiós ni siquiera es su mejor trabajo.